Desde la Cancillería Estatal de Baviera, mientras el presidente Gabriel Boric se encuentra en su gira por Europa, ha emitido un mensaje de alerta ante el Estado de Catástrofe decretado en la región del Bío Bío. El mandatario advierte sobre la furia de un sistema frontal implacable que amenaza con continuar su avance desde Biobío hacia el norte del país.
“Estamos ante lluvias muy, muy fuertes. Hemos tenido algunos desbordes de ríos. Este sistema frontal va a seguir golpeando a nuestro país”, declaró Boric ante los medios chilenos presentes en Alemania. La decisión de declarar el Estado de Catástrofe, explicó, es una medida preventiva para asegurar que todos los recursos del Estado estén disponibles para ayudar a quienes lo necesiten en estos momentos de crisis.
Con una logística en marcha, Boric informó que las autoridades locales están desplegadas en terreno, supervisando que los servicios funcionen adecuadamente. Además, anunció la suspensión de clases en varias regiones, incluyendo el Maule, Ñuble, Araucanía y Los Ríos, como medida de precaución.
El llamado del presidente no podría ser más claro: atender los llamados de evacuación y las alertas del SAE es crucial para evitar víctimas fatales. “La responsabilidad de que no tengamos víctimas fatales es compartida”, enfatizó Boric, subrayando la importancia de la colaboración ciudadana.
Desde Baviera, Boric reflexionó sobre la crisis climática global y su impacto en Chile, señalando que “no tiene fronteras” y que es un desafío que debe enfrentarse con acciones concretas a nivel internacional.
Mientras tanto, en el frente local, el Servicio Nacional de Prevención y Respuesta ante Desastres (Senapred) emitió un informe sobre las consecuencias del sistema frontal en la zona centro sur del país. Más de 400 personas damnificadas y mil viviendas dañadas son el triste saldo de esta tormenta que se espera que se prolongue hasta el viernes.
Las alertas rojas y amarillas se extienden por varias regiones, y se pronostican lluvias intensas y vientos poderosos que afectarán desde el Maule hasta Coquimbo. La precaución es la consigna mientras la nación enfrenta uno de los mayores desafíos de la naturaleza.
En resumen, el país se encuentra en alerta máxima ante la furia de un sistema frontal que no da tregua. La respuesta coordinada y la colaboración ciudadana son esenciales para hacer frente a esta emergencia climática sin precedentes.
