Las localidades a lo largo del histórico Ramal Talca – Constitución están escribiendo un nuevo capítulo en su historia. En una iniciativa liderada por las Comunidades del Ramal, junto a una red de actores públicos y privados, y con el respaldo de la ONG SurMaule, se han desarrollado seis itinerarios turísticos piloto que buscan posicionar el turismo rural como motor de desarrollo y resiliencia.
Una apuesta por la identidad local
Tras los incendios forestales de 2017, que devastaron gran parte del territorio, las comunidades del Ramal decidieron reinventarse, apostando por el turismo como una alternativa productiva sostenible. “El turismo comunitario ha demostrado ser una herramienta socioeconómica poderosa para un territorio como este, rico en patrimonio natural, ecológico y cultural. Aquí se conservan tradiciones y saberes antiguos que son una expresión viva de la cultura del campo chileno”, afirmó María José Santa María, coordinadora del Proyecto de Turismo Rural Comunitario de la ONG SurMaule.
Los itinerarios han recorrido localidades emblemáticas como Mellico, Las Palmas de Toconey, Curtiduría, Corinto, Maquehua y, finalmente, González Bastías. Cada recorrido ha permitido evaluar la funcionalidad de las actividades turísticas, considerando las particularidades de cada comunidad y la preservación de su identidad.
Un turismo que rescata lo mejor del Maule
La seremi de Gobierno, Nataly Rojas Seguel, quien también es parte de la Mesa de Turismo Rural, destacó la importancia de esta iniciativa: “El turismo rural en el Ramal recoge lo mejor de los campos chilenos, de sus tradiciones y su patrimonio. Es un espacio que debemos conocer, valorar y potenciar, brindando las herramientas necesarias para que las comunidades sigan creciendo”.
Ruth Lara, vecina de Maquehua y anfitriona de desayunos campestres para los visitantes, describió cómo esta experiencia conecta a los turistas con la esencia del campo. “Lo que hacemos aquí es mostrar nuestra vida diaria, con sencillez y autenticidad. Un desayuno bajo un árbol, con productos locales y nuestra calidez, logra que la gente viva la naturaleza misma. Este proyecto nació de la necesidad de reinventarnos después de los incendios, y hoy somos un destino que invita a conocer la vida real del campo chileno”, señaló.
Turismo comunitario: una visión sostenible
El enfoque comunitario se posiciona como un modelo de turismo sostenible, donde los habitantes son protagonistas del desarrollo local. Las experiencias en el Ramal no solo promueven el patrimonio, sino que fortalecen los lazos entre las comunidades y los visitantes.
Con estas iniciativas, las Comunidades del Ramal buscan consolidar su oferta turística, atrayendo visitantes que valoren la autenticidad, la naturaleza y la riqueza cultural del Maule.
Sintoniza Radio FM+ 92.3 Talca para más noticias que conectan con nuestra región y sigue nuestras redes sociales para no perderte lo que ocurre en el corazón del Maule.
